La gamificación en el aula se convierte en un recurso casi obligatorio en el día de hoy. Pero, seamos sinceros, ya no solo por ellos si no por ti mismo, como docente. Me explico: seguro que llevas años y años impartiendo lo mismo, con más o menos variaciones en tus explicaciones y que has entrado en un bucle de monotonía en el que el tiempo se convierte en un castigo y solo tienes el único deseo liberador de escuchar el timbre del fin de la clase.
Si eres de estos, lo tienes bien fácil: toca cambiar un poco. Toca divertirse, ilusionarse en clase, como volver a empezar de cero.
Las experiencias de gamificación mediante pequeñas dinámicas te ayudan a volver a conectar con tus clases y, créeme, que una hora te sabe a muy poco. En este post os presento una dinámica para los más pequeños de secundaria. La he llamado INTERSTELLAR y ahora os explico por qué.
La verdad es que una asignatura como la que imparto, Biología y Geología, te regala un temario que es muy adaptable a todos los gustos de estos pequeños preadolescentes inquietos, impulsivos, impacientes y todos los adjetivos que queráis ponerles. Y esto lo digo porque temas como animales, dinosaurios, planetas… tienen un gancho especial con ellos (y con todos, creo) Te hacen conectar con la naturaleza, creo que todo se debe a eso…
Pero voy al grano, que me lío… Interstellar es una experiencia de gamificación con un poquito de teatro, o más bien mucho. Se trata de pasar un buen rato, de divertirnos todos y de paso de repasar algunos contenidos teóricos que no viene nada más, oye. Pero ¿qué puede enganchar más a un chico o chica de 1º de ESO? ¿qué temática puede hacer que entren en la dinámica desde el primer momento? Si alguno de los que estáis leyendo esto impartís BioyGeo en este nivel sabréis que hay una palabra que al ser pronunciada en clase genera una mezcla de sensaciones que facilitan un pico de atención abrumadoR: ¡EXTRATERRESTRES!
Están dentro, solo quieren oírte y esperan pacientemente que tienes que decir sobre los extraterrestres. Aquí empieza nuestra historia:
Créeme que, si después de esto la emoción de tus pequeños astronautas no está por las nubes, de verdad estás lidiando con gente dura de pelar. En cualquier caso, continuamos con la historia.
Después de estos antecedentes, el director del centro educativo toma cartas en el asunto…
¡¡están entre nosotros, en el equipo de profesores del centro!! (mucho drama)
Es el momento de presentar a los personajes. Y sí, es inevitable, vuestros pequeños investigadores ya están dentro de la dinámica, muy dentro diría yo. Son sus profesores y los conocen muy bien y hay que investigar sus movimientos…¿qué puede ser mejor que eso?.
En este punto a la hora de describir los personajes es muy importante jugar con pistas que caractericen a los profesores involucrados en su día a día, que sean fáciles de reconocer. Además, añadimos aquí contenido teórico en torno a una pregunta: ¿qué necesitaría un ser vivo extraterrestre para vivir en planeta? ¿cómo se adaptaría a las condiciones de la Tierra? Esta parte es a gusto del consumidor, siempre teniendo en cuenta lo trabajado en clase.
Pero claro, como os podréis imaginar en toda investigación necesitamos pruebas. Pues eso es lo que hemos encontrado pruebas de cada sujeto. Las pruebas son muy variables: cartas con pistas, mensajes en clave, grabaciones en teléfonos móviles…
Y listo, lo tenemos todo. Es hora de que ellos sean capaces de elaborar una hipótesis, argumentado razones de peso para formular una acusación y descubrir al extraterrestre que convive con todos nosotros. Sin duda, está ultima parte es la más interesante, es mágica. Sin querer te das cuenta que muchas argumentaciones están cargadas de evidencias basadas en todas las pruebas que les has dado y muchas más que ellos absorban en los profes implicados. Además, esto es lo más bonito, sin duda, verás como muchos de ellos utilizan todo lo que les has explicado (no importan cuando) para construir una hipótesis fuerte.
De verdad, si después de esto eres de lo que sigue aburriéndose en clase, querido colega, eres muy duro de pelar… 😉